El tratamiento facial que embellece también brazos y manos:
Un protocolo facial y corporal que trabaja desde la elegancia del gesto, reestructurando facciones, liberando tensiones y devolviendo al rostro y al cuerpo una nueva presencia. Inspirado en la forma grácil del cisne, este ritual redefine el contorno facial, alarga visualmente cuello y escote, suaviza brazos y manos, y mejora la postura corporal y energética.
Gracias a la acurada técnica de masaje manual y con Joyas de Tocador, se liberan puntos clave de tensión, favoreciendo una expresión más bella.